Los pilotos más populares de la Fórmula 1 en 2022 tienen algo en común: heredaron la pasión y la admiración por el automovilismo de sus padres.
Max Verstappen, Charles Leclerc, Sergio “Checo” Pérez, Lewis Hamilton y Carlos Sainz Jr. encabezan este año la lista de la F1 con sus respectivas escuderías, pero no han llegado ahí solos, han tenido el apoyo de los hombres que los vieron crecer.
El tapatío Sergio “Checo” Pérez es hijo de Antonio Perez Garibay, quien fue criado por su madre, Juanita Garibay Guerrero, pues a su padre, quien falleció de una cirrosis debido a su alcoholismo, lo conoció muchos años después.
Pérez Garibay también fue piloto y fue quien le inculcó el amor a su hijo por los autos. Entró a la política en 2015, como candidato de Nueva Alianza a la alcaldía de Guadalajara, luego intentó ser senador en 2018 por Morena, en las elecciones de 2021 se registró como precandidato a la alcaldía de Guadalajara, pero no fue elegido.
Antonio siempre da de qué hablar cada vez que Sergio gana una carrera o se sube al podio, ya que no puede evitar mostrar su felicidad.
Jos Verstappen llegó como un huracán a la Fórmula 1. Firmó como piloto de pruebas para Benetton en 1994, para después subir a un asiento de carrera junto con Michael Schumacher. El padre del actual mejor piloto, Max Verstappen, participó en 107 grandes premios de la F1.
Recientemente Jos fue tendencia por declarar que durante el Gran Premio de Mónaco, Red Bull debió haber priorizado a su hijo y no a Sergio Pérez, quienes terminaron en tercero y primer lugar respectivamente.
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Lewis Hamilton ha declarado que su padre, Anthony, reconoció de inmediato su talento por los autos. De niño, el piloto de Mercedes veía con detalle cómo su “héroe” ponía en marcha su vehículo personal y sabía que quería estar siempre entre los rugidos del motor.
A pesar de que los padres de Lewis se separaron cuando este tenía dos años, los fines de semana convivía con Anthony y juntos veían las carreras de la F1. Ahora él está en cada paso de la carrera del siete veces campeón.
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Hervé Leclerc le transmitió la pasión por el automovilismo a su hijo Charles Leclerc. Hervé compitió en 22 ocasiones en la Fórmula 3 entre 1983 y 1988. Después volvió a la pista, pero para apoyar la carrera de su hijo.
En 2010, cuando Hervé se dio cuenta que no podía pagar para que su hijo terminara la temporada de karting, buscó una empresa que representaba pilotos, dando todo para cumplir el sueño del monegasco.
Hervé murió en el 2017, a la edad de 54 años, después de luchar contra “una larga enfermedad”. Su fallecimiento se dio cuatro días antes de que Charles se llevara el evento principal de la Fórmula 2 de Bakú.
“Cuando terminaba segundo, mi padre no era el más feliz, así que me centré en las victorias. Sólo me vale ganar, para asegurarme que él aún sonríe. Mi padre siempre me enseñó a mantener los pies en el suelo y a no parar de esforzarme. Estaría orgulloso viéndome ahora”, declaró el piloto de Ferrari.
Carlos Sainz Jr. tiene muy buenos genes del mundo del automovilismo gracias a su padre Carlos “El matador” Sainz, quien fue dos veces campeón del mundo de rally en 1990 y 1992 con Toyota, por lo que es considerado el mejor piloto español de rally de toda la historia.
Aunque no comparten disciplina, la pasión de ambos es sentir la adrenalina que otorga ir a toda velocidad sobre cuatro ruedas.