Estamos viviendo una época complicada a nivel mundial debido a la pandemia por coronavirus. Muchas personas aún se encuentran tomando clases o trabajando desde sus casas y el contacto con el exterior es tan limitado que parece casi imposible no sentirse estresado.
Para bajar sus niveles de estrés, algunos hacen ejercicio, cocinan, meditan o hacen yoga; otros más, como los japoneses, se meten en un ataúd. Aquí en De10.mx te contamos de qué se trata.
En Japón hay personas que ya no saben cómo lidiar con el estrés y es en este contexto que surge una nueva manera para “relajarse”. Para algunos puede ser considerada como una experiencia traumática, aunque para otros, permanecer encerrados en un féretro resulta de lo más liberador.
La empresa Kowagarasetai, especializada en crear experiencias terroríficas, es la creadora de esta iniciativa que ya se posicionó como una de las más polémicas por su peculiaridad.
¿Pasarías 15 minutos en un ataúd?
La idea es meterse al ataúd y quedarse allí por 15 minutos, pero no solo eso, pues el féretro tiene una pantalla donde la persona puede ver lo que pasa en el exterior. Lo malo de esto es que afuera se desarrolla una especie de historia de terror donde algunos zombies, fantasmas o criaturas terroríficas no dejarán de asustarte y hacerte gritar.
Ahora que una simple plática entre dos personas puede provocar un contagio de Covid-19, esta perturbadora experiencia busca convertirse en una salida al estrés acumulado por la pandemia, pues la persona puede estar aislada y gritar sin miedo a emitir saliva. Es como entrar a la casa del terror, pero dentro de un ataúd.
Las 10 meores películas de terror de todos los tiempos
Los responsables de esta empresa destacan que este tipo de experiencias espeluznantes permite a las personas desahogarse y sacar a flote todas las emociones que la Covid-19 les ha generado, además de que también permite a sus empleados sobrellevar la crisis ocasionada por la pandemia, pues antes solían trabajar en parques de diversiones, los cuales se encuentran temporalmente cerrados.
El precio por pasar 15 minutos de terror dentro de un ataúd es de casi 8 dólares, unos 180 pesos mexicanos…¿te animarías?
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