Su nombres es Ashley Soto y es una joven de Florida, Estados Unidos, que tiene más de 85 mil seguidores en Instagram. ¿La razón? Porque descubrió la posibilidad de crear arte con su piel, a pesar de que padece vitiligo.
Se trata de una enfermedad autoinmune que provoca la pérdida de melanina y la consecuente falta de pigmentación en algunas zonas de la piel. A muchos les podría parecer un impedimento para sobresalir o llevar “una vida normal”, pero tras varios años de sufrimiento, esta joven supo sacar provecho de su condición y ahora es un ícono del internet.
Fue diagnosticada a los 12 años de edad, cuando la primera señal de la enfermedad apareció en su cuello. Conforme se extendía, ella iba sintiéndose más y más avergonzada. Sobre todo, después de que una niña pequeña le preguntó si se había bañado con lejía (un líquido corrosivo).
Pasó muchos años ocultando su piel, usando pantalones, camisetas y blusas de manga larga para que no la vieran como a un “bicho raro”, pero al final de su adolescencia decidió que no iba a permitir que su piel le impidiera hacer lo que más le gusta.
Ashley comenzó a ponerse retos, como caminar por la calle mostrando sus brazos. Con el tiempo, logró hacer de su cuerpo una obra de arte. En una entrevista al Daily Mail, contó que nunca se había dado cuenta de lo bonito que podía ser el vitiligo, hasta que decidió usar un marcador negro para delinear sus bordes y resaltar los distintos colores de su piel. “Noté que las áreas blancas lucían como un mapa y eso me pareció maravilloso”, declaró.
Ahora su cuerpo es lienzo para mapas y flores y en De10.mx te mostramos esa imperfección, que ella transformó en arte ¡Mira!
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Es hermosa ¿no?