El proceso de embarazo no es algo fácil, durante los nueve meses de gestación tanto el bebé como la mamá corren distintos riesgos que deben ser monitoreados por un ginecólogo. Cuando llega el momento del parto es otro momento de tensión, sin importar que sea cesárea o natural.
Si es de esta última forma, la señal que dará el bebé de que ya viene en camino será el “romper aguas” como popularmente se le conoce al rompimiento de la bolsa amniótica, que es una fina membrana con líquido que envuelve al feto en el útero materno.
Su función es muy importante porque al mantener “nadando” al pequeño, ayuda a evitar lesiones, lo protege de la presión de los órganos internos de su madre y amortigua los golpes. Además de darle libertad para desarrollarse, al mismo tiempo que aísla al bebé de bacterias que podrían poner su vida en riesgo.
Foto: Instagram @nachoptomasone
Al momento que a la mujer se le rompe la fuente, por la fricción de las contracciones, le avisa que debe prepararse porque el parto ha comenzado o está a punto de iniciar, pero esto no siempre pasa como en las películas.
Cuando el bebé sale del vientre dentro de la bolsa amniótica se le conoce como parto velado, nacer con velo, con el manto de la virgen o enmantillado. Cuando se logra captar una imagen de un pequeño tal como estaba dentro del vientre de su madre se hace viral porque no es algo que suceda seguido, aunque no significa que su salud es mejor o peor que cualquier otro niño.
El ginecólogo obstetra Ignacio Pérez Tomasone, jefe de la Unidad del Servicio de Obstetricia del Hospital General de Agudos Parmenio Piñero en Buenos Aires, Argentina, compartió un video en su cuenta de Instagram de un bebé dentro de su bolsa amniótica segundos después de que lo sacara del cuerpo de su madre.
En el clip se observa al pequeño con la mano en su rostro y sus piernas dobladas, en posición fetal, además de traer el cordón umbilical alrededor de su cuello, razón por la cual el médico decidió realizar una cesárea por ser algo muy peligroso, al punto de causar asfixia.
Como si de una obra de arte se tratara, el ginecólogo gira al bebé para darnos una imagen completa desde distintos ángulos. Después de casi un minuto, rompe la bolsa con un instrumento quirúrgico y extrae el líquido con un tubo. Inmediatamente después le quita el cordón del cuello, el pequeño se estira y comienza a llorar.
El video del especialista de la salud se hizo viral y ya tiene más de dos millones y medio de reproducciones. Si eres amante de los bebés y la medicina, en su perfil de la red social postea constantemente otros partos, como gemelos en una sola placenta o nacimientos vaginales.
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